CUBA: ¿TRANSICIÓN AL NEOFASCISMO?

CONECTANDO LOS PUNTOS

Por: Alberto Luzárraga

 

 

El régimen cubano entró de lleno hace tiempo en un neofascismo disfrazado de marxismo. No es difícil, a fin de cuentas el fascismo, como sintetizó felizmente una persona con quien conversaba, no es sino comunismo privatizado. La cúpula técnica más joven, que no es lo mismo que Castro, sabe que los comités, asambleas, etc. no resuelven nada excepto dar empleo a los cotorrones ideológicos. El fascismo es más práctico. Selecciona a un buen empresario con pocos escrúpulos y frecuentemente le da un monopolio.

 

Claro está, con carta blanca para que lucre con tal de que produzca. Eso incluye el "derecho" a explotar a sus trabajadores y la obligación de compartir sus utilidades con el régimen y sus funcionarios que así nutren sus cuentas extranjeras. La ley de inversión extranjera y las empresas mixtas fue el primer paso y se lo vendieron al comediante en jefe como la única tabla de salvación.

 

Un dividendo accidental fue el que Castro siguiera hablando de socialismo. Es su cantaleta y el opio para los comunistas históricos. A Castro le conviene personalmente y a la cúpula le da una cobertura propagandística pues desvía la atención de lo que hacen.

 

Es lógico. Para hombres jóvenes apostarse todo a las manías de un anciano demente resulta muy peligroso. Tienen que buscar la manera de prolongar su estancia en el poder y para ello necesitan un invento. Y no van a parar mientes en nada de lo que sea preciso hacer. El anuncio reciente sobre el inminente desmantelamiento de 71 ingenios es muy significativo. Sigue a la noticia dada por Reuters en Marzo 7 sobre la venta de una parte de la industria a una empresa mixta llamada Compañía Azucarera Internacional cuya constitución fue aprobada el 6 de diciembre del 2001 según se publicó en la Gaceta Oficial. A esta compañía se le concedió autorización para exportar azúcar de modo que el tinglado queda armado bajo la supuesta legalidad vigente.

 

Todo lo anterior indica varias cosas. Una, se publica el asunto porque el socio asesorado por sus abogados quiere "papelitos" y dos el socio quiere un negocio viable antes de invertir, cosa que es lo común en estos casos.

Y la industria azucarera cubana en buena parte no lo es. Hoy en día muchos países producen grandes cantidades de azúcar para su consumo interno, con ingenios modernos y precios internos apoyados por sus gobiernos que son muy superiores al precio del mercado mundial. Cuando tienen buenas cosechas exportan sus excedentes y echan abajo los precios en el mercado mundial. Cuando no, importan de los productores que siempre tienen excedentes como Cuba. Pero esto hace que Cuba en buena parte se haya visto relegada a la condición de suministrador marginal de un mercado cada vez más pequeño e impredecible. En esas condiciones la industria cubana abandonada, canibalizada y sobre dimensionada no puede sobrevivir y tiene que reducirse. Lo único que vale es la tierra para dedicarla a cultivos más rentables.

 

Eso precisamente están haciendo los de la cúpula a pedido de su socio que no va a pagar salarios en negocios quebrados. Dejarán los ingenios mejores y crearán un inmenso latifundio dedicado a otros cultivos. ¿Y qué de los obreros que pagan por décadas de estupidez y pésima administración castrista? Bien gracias, ya se anuncian planes de "entrenamiento y reubicación".

 

Es un paso audaz, pues según ellos van a dejar sin empleo a 100 mil cubanos y según nosotros tal vez a más de 200 mil porque las industrias en los países comunistas siempre cuentan con una plantilla enorme sean o no necesarios los obreros. ¿Qué conclusiones podemos sacar de este paso?  Una queda muy clara. No hay límites y andan pensando las cosas con detenimiento. Han suscrito tratados bilaterales e inversión con mas de 40 países (ver http: //www.futuro de cuba.org sección económica bajo el título THE CONTRIBUTION OF BITS TO CUBA’S FOREIGN INVESTMENT PROGRAM Jorge F. Pérez-López and Matías F. Travieso-Díaz) y la decisión sobre el azúcar indica que no hay reticencias a caer de lleno en lo que sea necesario incluyendo medidas que no son económicas.

Y aquí cabe una última y muy importante reflexión. Lo que le falta a este tinglado es un componente político para vestir la mona. Saben que están muy cerca de Estados Unidos y del exilio, y que a la larga la simple fuerza no es buena solución. ¿Cómo resolver este dilema? Con paciencia y ganando tiempo para cuajar sus negocios. Si ello significa tolerar un proceso político relativamente inocuo porque será bajo sus reglas y su constitución..... ¿Por qué no? Y si lo monta gente de buena fe aun mejor, viste más.

No hay garantías de que les salga bien la jugada. Es juego difícil y peligroso pero entendamos que lo es para ellos y para nosotros y que no debemos emocionarnos demasiado con nada. Somos propensos a ello. Analicemos por qué pasan las cosas y por qué en una dictadura se toleran a veces y se persiguen en otras ciertas acciones. Comprendamos que en el gobierno de Castro existen facciones y divisiones. Castro controla todo el discurso público pero sólo tiene una parte del poder porque sus facultades están disminuidas, depende de otros para muchas cosas y encima no entiende ni jota de administrar nada como lo ha demostrado "ad nauseam".

La solución de Cuba está en crear un país libre y justo sin castas de nuevos ricos surgidos de la nueva clase de mayimbes con Masters en Business Administration (también andan en eso). Esto es juego de ajedrez, no juguemos como si se tratase de jugar a las damas chinas. Observar, valorar y apoyar los acontecimientos favorables pero siempre partiendo de una base: reforma a fondo y no a medias. Pienso que Marta Beatriz Roque anda clara en su postura de no dejarse envolver. La suscribo y por mi parte digo: ¡Fuera la constitución actual y empecemos la tercera república!